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La comunicación debe volver a ser un instrumento para dejar de ser un fin en sí misma

Política

Por: Laura Muñoz @LauraMComunica

La comunicación política es considerada como un espacio público en constante reconstrucción, cumple un papel fundamental en los sistemas democráticos y busca un mejor entendimiento entre los integrantes que componen la sociedad y ésta con el grupo gobernante.

 Según Weber, “se diría que la legitimidad de un régimen político descansa en un proceso de comunicación orientado a socializar los sentimientos afectivos, las premisas racionales, las creencias religiosas o las expectativas de determinadas consecuencias-intereses que garantizan la existencia y reproducción de los diferentes tipos de dominación” (1979: 27).

 La comunicación política del mañana, están marcadas por híper-liderazgos, la microsegmentación y el papel que viene jugando el marketing político en el funcionamiento de los sistemas democráticos.

 Las tendencias del futuro destacan:

-De la sociedad de masas a la individualización de la sociedad.

-La mujer en política.

– La manufactura del consenso: Spin doctoring y propaganda en la era de la Posverdad.

– El ciudadano es concebido aquí como sujeto y fin de la comunicación política, en otras palabras, es uno de sus protagonistas.

– El papel que juegan los datos, el Big Data en la planificación estratégica. La capacidad que se tenga para su procesamiento serán factores centrales al servicio de la comunicación política.

– El impulso de la comunicación digital, a raíz de la pandemia, estamos hiperconectados. El uso de la comunicación digital como medio para llegar a los electores.

 La comunicación política enfrenta nuevos desafíos:

 Uno de los desafíos, son las las fake news. El desarrollo de la ciencia de datos. “Nuestros propios sesgos cognitivos y los filtros burbuja de las redes sociales, junto a la propagación de ‘fake news’, provocan que cada vez sea más difícil distinguir la verdad de los hechos alternativos”.

 Los híper liderazgos. EL papel de los líderes en el marco de sociedades hiperconectadas. Se acabarán algunos partidos y nacerán otros. El discurso político seguirá polarizado y permanecerá en el debate público los extremos buscando ganar adeptos y cristalizar prejuicios.

 La amenaza que existe de la degradación del debate público en el actual contexto electoral colombiano que ha venido imponiendo la difamación, la mentira y la superficialidad y la instrumentalización de discursos de transformación.  Todo esto en menoscabo de un debate programático profundo alrededor de los reales problemas del ciudadano.

 

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