Colombia apuesta por la preservación de su diversidad lingüística: lanzan programa de documentación de diez lenguas indígenas

En el marco del Día Internacional de la Lengua Materna y el Día Nacional de las Lenguas Nativas, el Ministerio de las Culturas, las Artes y los Saberes, en alianza con el Instituto Caro y Cuervo (ICC), presentó el Programa de Documentación de Diez Lenguas para el 2025, una iniciativa que busca registrar, en formato audiovisual, diez lenguas indígenas junto con las prácticas culturales asociadas a su uso.
Este proyecto se desarrollará en los departamentos de Vichada, Vaupés, Guaviare, Caquetá, Amazonas, Putumayo, Cauca y Cesar, territorios donde habitan hablantes de nasa yuwe, namtrik, inga, muruy, kakua, nɨkak, miraña, kamëntsá, mapayerri y kankuamo.
“Esta labor no es sólo un ejercicio académico, sino un acto de resistencia cultural, una forma de preservar y revitalizar idiomas que, en muchos casos, están en riesgo crítico de desaparición”, afirmó la ministra (e) de las Culturas, Yannai Kadamani Fonrodona, destacando que el conflicto armado y el desplazamiento forzado han interrumpido la transmisión intergeneracional de estas lenguas.
El programa, que responde al Decenio Internacional de las Lenguas Indígenas (2022-2032), incluirá traducción de materiales lingüísticos, desarrollo de recursos didácticos bilingües y la producción de archivos audiovisuales para fortalecer la enseñanza y preservación de estos idiomas. Un principio rector de la iniciativa es que los procesos de documentación sean diseñados y liderados por los propios miembros de las comunidades, garantizando su pertinencia cultural.
Durante la socialización del programa, el investigador Elio Miraña, del pueblo Miraña del Amazonas, resaltó la importancia de la iniciativa en la transmisión del conocimiento a nuevas generaciones: “Los pueblos originarios nacemos con una responsabilidad. Es valioso poder guardar estos registros y sistematizar nuestra memoria para quienes nos quieren conocer”.
Este esfuerzo reafirma el compromiso del Estado con la protección de la diversidad lingüística y cultural de Colombia, asegurando que estas lenguas, junto con las historias y saberes que contienen, continúen vivas en el tiempo.