«Los Guardianes del Orden»: la polémica propuesta de seguridad en Bogotá

La Alcaldía de Bogotá, bajo el liderazgo de Carlos Fernando Galán, ha presentado la iniciativa «Los Guardianes del Orden», un grupo conformado por exmilitares y expolicías destinado a mediar en conflictos menores y reforzar la seguridad en la ciudad. Esta propuesta ha generado un intenso debate público, con opiniones divididas sobre su eficacia y posibles implicaciones.
Según la Alcaldía, «Los Guardianes del Orden» estarán integrados por funcionarios de la Secretaría de Seguridad y exmiembros de la fuerza pública. Su principal función será apoyar en la resolución de conflictos de convivencia que no requieran la intervención directa de la Policía. Es importante destacar que estos guardianes no estarán armados ni tendrán facultades para realizar arrestos. Su labor se centrará en mediar y facilitar la convivencia ciudadana.
La propuesta ha sido objeto de críticas y preocupaciones desde diversos sectores. El presidente Gustavo Petro expresó su rechazo a la iniciativa, cuestionando el enfoque y señalando posibles riesgos de represión. En su cuenta de X, Petro manifestó: «Se transformaron los jóvenes de convivencia y paz en ‘guardianes del orden en Bogotá’. No entiendo el paso a la derecha del Nuevo Liberalismo».
Por otro lado, el senador Ariel Ávila advirtió sobre los riesgos de la propuesta y sugirió que podrían surgir problemas en la interacción de estos guardianes con ciertos grupos sociales, debido a la formación militar de los exmiembros de la fuerza pública. Ávila señaló la importancia de definir claramente las funciones y límites de este nuevo cuerpo para evitar posibles conflictos.
Además, expertos en seguridad han expresado inquietudes sobre la falta de claridad en la implementación de la iniciativa y el posible impacto en la confianza ciudadana. Algunos temen que la creación de este grupo pueda promover una sociedad vigilante, alimentando la desconfianza en lugar de fomentar la convivencia.
Ante las críticas, la Alcaldía ha defendido la iniciativa argumentando que busca suplir la escasez de personal policial en la ciudad. César Restrepo, secretario de Seguridad de Bogotá, explicó que los guardianes del orden no son policías, no están armados y no cumplen funciones policiales. Su rol es apoyar en la gestión de conflictos menores y facilitar la reacción inmediata de la Policía cuando sea necesario.
La implementación de «Los Guardianes del Orden», ha desatado un debate sobre su viabilidad y posibles consecuencias. Mientras algunos la ven como una respuesta necesaria ante la falta de personal policial, otros alertan sobre los riesgos de delegar funciones de seguridad en exmilitares y expolicías sin una formación adecuada para tareas de mediación ciudadana. La efectividad y el impacto de esta propuesta se evaluarán en los próximos meses, a medida que se implemente y se observen sus resultados en la convivencia y seguridad de la capital.