Podemos entender la comunicación pública, “como un proceso de interacción y de influencias mutuas entre la sociedad civil, el Estado, la sociedad política y la ciudadanía”.
A través de estas instituciones definen sus roles en la sociedad, generan su posicionamiento ante la opinión pública y fortalecen su utilidad en la organización de las comunidades, es decir que posibilitan su legitimidad.
Algunos elementos a tener en cuenta para su buen desarrollo:
– Estructurar un sistema ordenado y coherentes que administren los procesos comunicacionales.
– Realizar una planificación precisa con orientación metodológica.
– Establecer planos previamente definidos, analizados y probados.
– Orientar las acciones alrededor de los Derechos Humanos.
– Fortalecimiento de la imagen (presente) y la consolidación de la reputación (pasado). Tener en cuenta que las diferencias el tiempo real.
Hoy este espacio, precisamente es donde se desarrolla una confrontación simbólica de gran trascendencia que, por un lado, promueve los valores del individualismo, consumismo y la violencia y, por otro, alerta sobre la necesidad de orientar las acciones alrededor de los Derechos Humanos.